Tengo hoy, como siempre, que agradecer mucho. Ayer tuvo lugar el pregón de la Hermandad de Estudiantes, y su Junta de Gobierno, presidida por D. Nazario Yuste, quiso que lo llevara a cabo yo. No sé si era el más apropiado y también desconozco si estuve a la altura. Lo que sé es que me alegré mucho y que hacerlo me ha hecho mucho bien.
Quiero a la Semana Santa, porque soy creyente y no me da vergüenza decirlo. Dentro de las hermandades hay mucha gente buena que es capaz de regalar muchas horas que dedican a Dios, lo cual les honra y yo aplaudo desde este humilde medio.
Quizá hayan, a veces, existido malentendidos, o quizá maleficencia, no lo sé. Lo que sí puedo afirmar es que he pertenecido a una Hermandad desde que era un niño y que me alegro mucho de ello. Nunca me he avergonzado de sentir la semana santa, y nunca ocurrirá.
Cómo no, debo también agradecer de especial manera a mi presentador, D. Francisco Miras, por sus palabras llenas de vera amistad.
Gracias a todos por seguir siendo asiduos de este blog.
